martes, 11 de noviembre de 2008
GuilleLlegó después de 11 años el partido que las nuevas generaciones y las viejas que tanto echan de menos estábamos esperando, ilusionados, impacientes y el equipo jugó en Alemania como si no tuviera cita alguna con la champions, con un equipo agazapado atrás y con todo el centro del campo perdido. 
Llegó el primer partido fuera de casa en el torneo doméstico que no olviden es el torneo que nos da la opción de jugar la champions y el equipo sale sin actitud pese a que todo el que entiende un poco de esto sabe que los primeros 30 minutos de Pucela son de un ritmo del 200 %.
Llegó el primer rival directo para el objetivo final, el rival plantea el partido con 3 hombres en el centro del campo que el míster no contesta viendo la superioridad de Duscher, Maresca y Romaric. Lo de Barcelona podríamos decir que fue un accidente pero yo no lo veo de esa forma.
Toda la línea del medio campo ofrecida desde el primer minuto al Barcelona y con un Xavi libre de marca y con tiempo para pensar. Resultado primer ridículo que por cierto me recuerda a otro en el Calderón, curiosamente el mismo entrenador en el banco. Maldita curiosidad.
Llegó el derby, para nosotros de lo más importante de la temporada. El míster saca a 4 jugadores en la medular pero salta a la vista desde los primeros minutos que sin trabajarlo durante la semana, que para eso están los entrenamientos pienso yo, estorbo continuo entre ellos mismos.
Llegó el Villareal, otro rival directo, y resulta que con un 4 a 2 y con 25 minutos por disputarse el míster decide dar el partido por perdido y no dar minutos a un chico de 20 años que dicen estar cansado, y eso que el anterior partido descansó. Suerte tuvimos que el coraje de un Simao vestido de crack arañó un punto.
Pero lo de Pamplona, para mi es la gota que colma el vaso. Si ya no he dado bastantes argumentos para pensarse la continuidad del que dirige el equipo, éste es sobrecogedor. Tanto le conmocionó el partido del templo de anfield al Vasco que se pensó que Pamplona era otro templo de Europa y salió con el mismo planteamiento
pero con una ficha cambiada.
Si hacía 5 días el que salió del once era un "10" llamado "Kun", en Pamplona fue un bota de oro nada más y nada menos. Que nadie dude que el Kun por muchas bromas que haga y trabajo específico que nos digan, no le hizo gracia sentarse en el banco de anfield, porque un jugador que a los 18 años sale de su país para triunfar en el fútbol europeo es ambicioso. Y tampoco dudéis que Forlán cuando se acercaba el momento de asaltar Pamplona y su
computadora lo traducía en goles, viendo el partido como espectador desde inicio, se moleste y con razón.
Para colmo de males si ya no es alarmante estar a 11 puntos de la cabeza tras 10 jornadas, 2 de los que tiran del carro no están con la felicidad que deberían estar. Se le acumulan los problemas a Aguirre, salta a la vista. Después de esta reflexión, muchos todavía piensan que es un suicidio echar al míster ahora, yo pienso que el suicidio es la continuidad, espero que no sea el único.
Llegó el Villareal, otro rival directo, y resulta que con un 4 a 2 y con 25 minutos por disputarse el míster decide dar el partido por perdido y no dar minutos a un chico de 20 años que dicen estar cansado, y eso que el anterior partido descansó. Suerte tuvimos que el coraje de un Simao vestido de crack arañó un punto.
Pero lo de Pamplona, para mi es la gota que colma el vaso. Si ya no he dado bastantes argumentos para pensarse la continuidad del que dirige el equipo, éste es sobrecogedor. Tanto le conmocionó el partido del templo de anfield al Vasco que se pensó que Pamplona era otro templo de Europa y salió con el mismo planteamiento
pero con una ficha cambiada.
Si hacía 5 días el que salió del once era un "10" llamado "Kun", en Pamplona fue un bota de oro nada más y nada menos. Que nadie dude que el Kun por muchas bromas que haga y trabajo específico que nos digan, no le hizo gracia sentarse en el banco de anfield, porque un jugador que a los 18 años sale de su país para triunfar en el fútbol europeo es ambicioso. Y tampoco dudéis que Forlán cuando se acercaba el momento de asaltar Pamplona y su
computadora lo traducía en goles, viendo el partido como espectador desde inicio, se moleste y con razón.
Para colmo de males si ya no es alarmante estar a 11 puntos de la cabeza tras 10 jornadas, 2 de los que tiran del carro no están con la felicidad que deberían estar. Se le acumulan los problemas a Aguirre, salta a la vista. Después de esta reflexión, muchos todavía piensan que es un suicidio echar al míster ahora, yo pienso que el suicidio es la continuidad, espero que no sea el único.
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No eres el único. Dije algunos días que Aguirre se ha complicado la vida en el Atlético de Madrid y nos ha metido en una situación que nos va a costar salir de ella con él o sin él.
Creo que no sabe lo que hace ya ni él. Demasiado crédito se le está dando, parece que el finiquito debe ser lo bastante caro, si no, no se entiede.